lunes, octubre 23, 2006

Sin explicación aparente.

Escribiendo estoy buscando una explicación para darle, tampoco escribiendo puedo encontrarla. Sé que puedo dar algunas razones o causas, pero no sirven ni van a ser aceptadas, ya que estoy encerrada por mis propias palabras, por la boludes ajena y por todo junto.
Entre tantas cosas, rompí algo antes de poder terminar de armarlo, antes de poder definir que era. Lo rompí sin recordar la forma, ni el modo en que lo hice. Pero lo rompí y hoy hundo mis manos para ocultar mi rostro avergonzado. Estoy deseando volver a esas horas, que el domingo sea solo domingo, que esta resaca no exista ni las consecuencias de ella.
Por qué tu sexo y mi sexo tienen esa particular forma arbitraria de relación y materia, de miradas y decir. Por qué todo aparece simultáneamente sin un orden cronológico, pero teniendo una fractura en ese preciso instante en el que te miro.

sábado, octubre 14, 2006

En la sombra del agua.

Las palabras se vuelven crueles y olvido remordimientos. Ya no diré que tomemos aire para hablar tranquilos. Hablar una mierda!. Ya no voy a buscar todo lo que no sucedió, me quedo con esto, con lo dicho, lo sentido y lo que voy hacer desde ahora. Ya no voy a comprender las ausencias. Ya no voy a creer en esas palabras que regalan magia. Ni voy a disculpar tu manera de herirme. Ya no se me da la gana.
Vulgar para que nadie sospeche vuelvo a evocar deseos sin creerlos imposibles e imagino realizarlos. Sin que importe si todo eso me llevara a donde quiero.
Elijo hacer silencio, con cientos de palabras rotas y heridas. Lejos esta mi enojo, mi alegría, mi bronca y desilusión de la imagen que reflejo. Ya no es eso, o es eso sumado a todo y a esto. Ya no se.

viernes, octubre 13, 2006

Deseando que el pronostico se equivoque.

Máscaras ignorantes buscando el triunfo inmerecido, de promesas rotas. Desconocían lo que iban produciendo, seguían nuestros pasos equivocados. Podemos evitarlo ahora,
o ya es tarde?


Igual afuera llueve y eso me hace feliz.

martes, octubre 10, 2006

Con ojos de tiempo...

Estoy escribiendo porque no me puedo poner a estudiar. Estoy todavía dormida y escribo para plasmar algo neurótico. Hoy quisiera vaciarme en palabras y rehacerme en letras, cruzar el portón de rejas negras, salir de la panza de mi madre y entrar en tu mundo sin la necesidad de que tengas que convencerme todos los días. Sí, todo eso quiero.
Estoy ansiosamente confundida, nadie se da cuenta de lo que me pasa. Me están atribuyendo gustos que ya no tengo y miedos que ya he superado. Últimamente no me están viendo como lo que siento que soy. Ni lo que ya soy. Sé que no puedo decirle al viento que se detenga, formo parte del viento, no puedo detenerme.
Estoy pidiendo que no me cuiden así, que no me esperen todo el tiempo, que no me sobrecarguen de cariño, que no me llamen a cada hora para saber como estoy o donde estoy. Quiero que no sientan que tienen o deben sostener mi vida. Y pido todo esto porque pedir menos no quiere decir que me lo saquen todo o no agradecerlo apropiadamente, sino que quiere decir vivir con todo esto y más pero cada uno ocupando el lugar en el que esta ahora, hoy. Y no por lo pasado ni por el ayer. Se entiende?
Igual no sé a qué me resisto tanto.

miércoles, octubre 04, 2006

El tiempo en mí...

Estoy contenta y hasta con mis pensamientos. Me siento una mujer segura, no es que antes no me sentía así, pero hoy ese significado es otro y desde otro lugar mucho más claro que el lugar en el que estaba ayer. Así que nada de palabras a medias, ni de oponerme a mi, ni a desear contrariar los vientos, ni a detenerme en el presente ni mucho menos a detenerme en esos amores a destiempo.
Hoy no voy a extrañarte, dejare la ventana entre abierta, apagaré la luz y dormiremos juntos, aunque nunca antes hayamos existido.