Todo tensionado y reiterado.

Estoy en medio de tantas confusiones y estados nefastos, que ya no puedo. O será que tan solo no se como sobrevivir a todo lo nefasto que me rodea y a veces sacude. No lo sé pero tengo una realidad que a veces me da la espalda sin darme la posibilidad de reacción. Tengo algunas gentilezas en preguntas cotidianas, puteadas analógicas, canciones que me llevan hacia donde no quiero ir. Personas intangibles, una incontinuidad de lo que me hace bien. Tengo un cuerpo que no aguanta, una soledad que amenaza con matarme en las noches de párpados insomnes y nadie lo sabe. Tengo un dios al cual le rezo sin importar que no me rescate, que no evite el dolor ajeno de esas personas cercanas. Más allá de eso me siento huérfana teniendo padre y no es justo. Como tampoco es justo estar atrapada en una crudeza que no entiendo y hoy, vuelve, a dolerme. Me estoy cayendo con huesos que llegan astillados al vacío que ya no siento y soy un tonto impulso hacia la nada que quiere que le den la posibilidad de reparar o evitar sus tantos errores.
Todo me esta doliendo en la piel, todo el tiempo y a la vez todo esta tan lejos de mí, que quiero salir gritando aunque ya me duele la garganta. Quiero evitar daños colaterales y no sé como se hace. Me siento a un punto en el cual casi podría extinguirme, estoy necesitando los cinco grados de Berlín o lo que sería mejor estar allá y que A. me salve como alguna vez ya lo hizo. En fin estoy necesitando a todo el mundo sin que nadie me necesite a mí. Sé que solo soy un paréntesis con incontenibles sentimientos que merece un fusilamiento sin derecho a últimas palabras. Lo sé. Pero, aún así,nada de esto me parece justo.