Estoy contenta, mejor dicho feliz, porque llovió, llueve y parece que seguirá lloviendo.
Por otro lado todavía estoy pensando si él teniendo tantas mujeres alrededor suyo, es capaz de retener mi nombre, si podrá reconocerme entre tantas. Quizás es la lluvia, tan de repente, que me hace pensar en él... Pensar que quiero que, otra vez, deje sin aliento a mis tetas, que me bese en la boca y se acerque fuertemente hacia mi. Que en sus caricias múltiples y sin ninguna preocupación me regale el mundo, como en ese instante pasado. En este instante, solo en este instante, tengo ganas de vos.
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