En verano suelo encerrarme, escapar del sol, nada de recorrer distancias. Pero en invierno siempre espero el sol y tener mucho frío, como cuando era chica y siempre esperaba la lluvia, más que ahora. En inviernos pasados todo ocurría entre su cuerpo y el mio y después nos fuimos haciendo la idea de que así no se podía. Mostrarnos, era necesario, nos decíamos.
Días y ese inviernos, que anticipadamente se esta dejando sentir, esta por llegar. LLegará en medio de cumpleaños familiares, en medio de todo. Y eso también le da un gusto especial, gusto a chocolate en rama. Y no sé si él y yo o su cuerpo y el mio estaremos en este invierno. En nuestro invierno. Alegremente no lo sé.
En invierno todo es tiempo, alegría, calor de leña y bufandas por todos lados.
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