Aburrida.

Insignificada. Sublevadas. Miradas inentintables. Tantas veces reciclada, FUI. Y ni hablar de las veces que estalle en mil fragmentos. Las veces que me descubrí, me ignore, me enamore, me desilusione, me duplique, me transcribí, me desvanecí, me evapore. Siempre ME.
Aparecer y desaparecer degustando la navidad. Mi navidad, otra vez MÍ ahorcándome.
S
I
L
E
N
C
I
O
Palabras, que malas que son a veces. Que fea su actitud de abandonarme, para mi que están tratando de parecerse a ese que resulto ser un idiota en letras.
Hablar, muchas veces no fue mi salvación, pero si me dejo enredarme en amores, triunfos, traiciones, derrotas, pienso que jamás hubieran sido mi vida, si me hubieran faltado las palabras. Por eso a veces las reclamo, les grito, las desafío a buscarme y las insulto.
En fin díganme palabras nuevas.